Leer, sé más feliz que yo, y darnos cuenta de que eso suena arcaico, extraño, es todo uno. Y sin embargo, en este desquiciado lugar del universo en el que vivimos, algunas rarezas que a veces nos salen al paso, nos hacen sentirnos profundamente bien.
Entre tantas dificultades de estos tiempos bien está que gocemos con algunos poemas bellos e insólitos como es el que aquí le presento. Se trata de un poema del P. JUAN AROLAS (1805-1849), un poeta desmesurado (1) del XIX y hoy ya casi olvidado.(2)
SÉ MÁS FELIZ QUE YO
Sobre pupila azul, con sueño leve,
tu párpado cayendo amortecido
se parece a la pura y blanca nieve
que sobre las violetas reposó:
yo el sueño del placer nunca he dormido:
sé más feliz que yo.
Se asemeja tu voz en la plegaria
al canto del zorzal de indiano suelo
que sobre la pagoda solitaria
los himnos de la tarde suspiró:
yo sólo esta oración dirijo al cielo:
sé más feliz que yo.
Es tu aliento la esencia más fragante
de los lirios del Arno caudaloso
que brotan sobre un junco vacilante
cuando el céfiro blando los meció:
yo no gozo su aroma delicioso:
sé más feliz que yo.
El amor, que es espíritu de juego,
que de callada noche se aconseja
y se nutre con lágrimas y ruego,
en tus purpúreos labios se escondió:
él te guarde el placer y a mí la queja;
sé más feliz que yo.
Bella es tu juventud en sus albores
como un campo de rosas del Oriente;
al Ángel del recuerdo pedí flores
para adornar tu sien, y me las dio;
yo decía al ponerlas en tu frente:
sé más feliz que yo.
Tu mirada vivaz es de paloma;
como la adormidera del desierto,
causas dulce embriaguez, hurí de aroma
que el cielo de topacio abandonó:
mi suerte es dura, mi destino incierto:
sé más feliz que yo.
Fíjese en la muestra extrema de generosidad que supone lo leído. El autor quiere que su amor, pase lo que pase, sea más feliz que él. Es el bien del Otro lo que desea el amante por encima incluso de su propio interés, algo extraordinariamente alejado del egoísmo actual. Y aunque se trate de poesía amorosa, el deseo que expresa hacia el Otro, hacia la amada, es de una generosidad tan extrema que debe aquí resaltarse por su rareza y encanto.
Léalo y reléalo despacio.
¿Y en nuestro sector inmobiliario?
Nuestro sector, tras la salvaje crisis padecida por casi todos e inducida por una minoría de criminales, no está para poesía. Sin embargo la necesaria actitud mental que debemos mantener en nuestro trabajo, encontrará en este, y en muchos otros poemas, consuelo y energía. No los desaproveche.
Y no se olvide que en nuestra área inmobiliaria la prioridad del interés del otro ―del cliente propietario o comprador―, frente al propio nuestro, también es prioritaria para un feliz resultado del encuentro de ventas.
Siga con Salud saboreando estas líneas del Padre Arola, uno de nuestros románticos ― y quizás por eso―, desmesurado.
Miguel Villarroya Martín a 4 de marzo de 2016/ Madrid. España / Fab.011 / ventasgrandes.com /
Notas:
(1) Los poemas del P. Juan Arolas pueden encontrarse en varios sitios tales como estos:
Wikisource: Juan Arolas htm
Búsquelos en ésos y en otros sitios y disfrute de la belleza de su poesía.
(2) Pueden encontrase algunas notas biográficas sobre el poeta en algunos sitios tales como:
(3) La imagen la hemos tomado de la página Juan Arolas Bonet, donde figura como: Creative Commons Reconocimiento Compartir Igual no comercial.
(4) En mi Web anterior, la que me tumbaron los piratas, esta sección de Motivación, tenía dos subcategorías más que las actuales, Eran estas: La poesía, un recurso de ventas olvidado y otra, dedicada a la Solidaridad. No estoy seguro de haber decidido bien, pero ese es el caso. Esta postal la he colocado en la Categoría de Fábulas y Cuentos y, quizás pronto cambie su nombre a Fábulas, cuentos y poesías. ¡Ya veremos!