La Formación inmobiliaria en España
Había formación inmobiliaria en España, mucho antes de la Crisis, pero esta serie destinada al estudio de su evolución, la vamos a iniciar mucho después de las primeras formaciones dedicadas a la superación de las oposiciones de APIS. Sin embargo, ya avanzamos, que este tema será objeto de comentario posterior.
La Formación inmobiliaria en España antes de la Crisis
Antes de la primera semana de julio de 2007 ―inicio oficial de la misma― había pocos estudios publicados sobre la formación inmobiliaria en España, por lo que las ideas que manejábamos entonces se correspondían mayoritariamente con las experiencias personales de los pocos que sobre estos temas hablaban.
Posiblemente, esta escasez extrema de estudios se correspondían perfectamente con la importancia que a la Formación Inmobiliaria se daba en aquellos días, pues ni era un concepto que estuviese de moda ni estaba fuertemente integrado entre las necesidades de las inmobiliarias (1). La Formación era una especie de producto de lujo y por tanto perfectamente prescindible.
No ayudaba para nada que unos años antes, la desafortunada desregulación de la Intermediación Inmobiliaria en España ―a principios del 2000― hubiese terminado con la mejor fuente de formación de la época. Con esa decisión la Formación requerida para obtener el título de agente inmobiliario (API) quedaba aparcada, pues ya no iba a haber ninguna otra convocatoria para lograr la licencia de Agente de la Propiedad Inmobiliaria. (2)
La oferta particular de formación sobre el sector inmobiliario se reducía a cursos jurídicos y, en algunos casos, a cursos sobre marketing orientados al agente inmobiliario, y casi nunca, a sus empleados. A la vez, la escasez de textos sobre marketing y ventas inmobiliarias era realmente notable (3). La causa estaba clara: ante la escasez de la demanda de este tipo de formación, la oferta era raquítica.
En la Formación Profesional se habían abierto en esos años anteriores dos actividades formativas muy interesantes: La AA. FF. Gestión Comercial Inmobiliaria y la AA. FF. Asistente de gestión Inmobiliaria, vigentes en aquellos años (y que lo seguirán siendo hasta la aprobación de la Cualificación Inmobiliaria denominada Agente Comercial Inmobiliario). Esas iniciativas, orientadas a los vendedores y captadores de las agencias― y no a sus titulares―, se impartían dentro del ámbito de la Formación Profesional, a iniciativa de los departamentos de formación de los sindicatos mayoritarios.
¿Y las franquicias inmobiliarias?
Por otra parte, las franquicias inmobiliarias ―como reflejo del país de origen de su bandería donde la Formación sí estaba valorada― y algunas otras agencias y consultoras, otorgaban importancia a la formación e, incluso, las primeras, hacían de ella un mecanismo de atracción hacia su negocio. Pero este tipo de formación cerrada ―sólo en y para las empresas de ese corte― no calaba en el sector, por esa misma razón de inaccesibilidad o disponibilidad general.
¿Y las asociaciones profesionales de inmobiliarios?
Algunas otras iniciativas de asociaciones profesionales, colegios y redes de agentes inmobiliarios― que surgieron al son de la desregulación señalada empezaron a principios de la década del 2000 a dar cursos sobre diferentes materias inmobiliarias a sus afiliados. Y así, empezaron a surgir los primeros expertos viajeros que se trasladaban de lugar en lugar a dar cursos inmobiliarios de uno o dos días de duración en diferentes sitios y a los contactos de esas asociaciones con diferentes escuelas y consultoras de formación con el fin de proveer a sus asociados de distintas actividades formativas.
Formación inmobiliaria de la patronal AEGI
Destaca entre todas ésas el programa de Formación Continua (4) puesto en marcha por la patronal AEGI y los sindicatos mayoritarios, que dentro de la Fundación Tripartita y como consecuencia de la firma del Convenio Colectivo del Sector inmobiliario, desarrollaron una serie de planes sectoriales de formación inmobiliaria del más alto interés. A partir de ellos, miles de personas pudieron formarse en actividades inmobiliarias específicas.
Otras iniciativas de formación inmobiliaria.
También fue destacable las ediciones que la UNED puso en mercado, de un curso de formación denominado Experto Inmobiliario, que venía a ser una actualización de los contenidos de las antiguas oposiciones a APIs. El curso se desarrolló con un cierto éxito mientras duró y puso al alcance de muchos agentes inmobiliarios conocimientos especializados sobre el sector. Otras universidades pusieron también en mercado, algún curso para Agentes Inmobiliarios.
Finalmente empezaron también a surgir algunas revistas especializadas y algunos textos específicos sobre materias inmobiliarias, con mayor o menor fortuna.
También algunas consultoras, universidades, escuelas de formación y algunas agencias y empresas iniciaron su presencia formativa en Intenet.
De algunos escasos estudios sobre la formación inmobiliaria, de esa época daremos cuenta en las siguientes postales.
La entrada en la Crisis
Y todo esto se producía en medio de una fiesta inmobiliaria que parecía no iba a terminar nunca y en la que “no se vendía sino que se despachaban los pisos” como se llegó a decir; por eso, todas las iniciativas indicadas tenían un éxito escaso pues la conciencia colectiva del sector creía que la formación era una cosa interesante pero no crítica.
¡Continuará!
¡Siga con salud!
Miguel Villarroya Martín, a 24 de junio de 2016 / / Madrid/ España/ Ref.002 / ventasgrandes.com
Notas:
(1) En la siguiente postal le presentaremos un artículo titulado: ¡Se nos olvidó vender! que explora las consecuencias de ese tipo de opiniones.
(2) La realización de algunas actividades de Formación inmobiliaria anteriores al 2000 no desdibujan lo dicho, pues es a partir del decreto desregulador sobre la actividad inmobiliaria cuando se incrementan especialmente.
(3) Véase un detallado razonamiento de esa escasez en un texto nuestro de aquella época titulado: La información en el mundo de las agencias inmobiliarias. UCI 2000. Pág. 15 y ss.
(4) El programa indicado continúa aún hoy en día. Los interesados pueden tener noticia de ello en la dirección: www.aegi.org
(5) La imagen utilizada es del fotógrafo húngaro Devanath. Y estaba en Pixabay como imagen de Dominio Público. A ambos agradecemos su cortesía por el uso de su foto.
(6): Este texto, fue publicado hace unos años ― en forma más breve―, en mi revista Más y Mejores Ventas Inmobiliarias.